El ácido ascórbico es un antioxidante. Se encuentra en fuentes como frutas frescas (cítricos) y verduras (pimientos). Por ejemplo: las fresas y el kiwi tienen más vitamina C que las naranjas, limones y mandarinas. ¿Por qué entonces siempre se dice que las naranjas son fuente de vitamina C? Porque las tomamos de postre y en esa comida son prioritarios, un pimiento se toma cocinado como guarnición y ahí pierden gran parte de su vitamina C.
La recomendación en cuanto a la dosis de esta vitamina todavía está en revisión por parte de los científicos. Fue descubierta como prevención para la enfermedad escorbuto, al ver que con 10 mg al día era suficiente.
La tarea principal de esta vitamina en nuestro organismo es su contribución a cicatrizar heridas. Posteriormente, los científicos comprobaron que había variabilidad individual, y para tener cierto margen se subió a 30 mg diarios. Cuando vieron que había problemas en la absorción, captación y excreción, se subió a 40 mg diarios. Las reservas, tras ver que eran de 900-1500 mg, se decidió que la dosis óptima era 60-80 mg/d. Cuando se llega a dosis de 100 mg/d se considera saturación.
La absorción se hace a través del intestino, pasando el ácido ascórbico a dehidroascórbico, y antes de ser absorbido éste, el intestino lo transforma a ácido ascórbico de nuevo.
Su tarea principal es la defensa del organismo, transporte, tejidos, leucocitos. Como es hidrosoluble se excreta por la orina a través del ácido oxálico.
El ácido ascórbico es un gran protector de mucosas, vasos y vías urinarias a parte de ser un antioxidante. Interviene en la síntesis del colágeno. El colágeno tiene unos aminoácidos llamados lisina y promina que están modificados. Esta modificación la hace la vitamina C. Interviene en la síntesis de noradrenalina.
La deficiencia de Vitamina C genera una enfermedad llamada escorbuto, que es que no se produce colágeno, lo primero que se afecta es enrojecimiento de las encías e incluso caída de los dientes. Hay hemorragia, hay inflamación… es una enfermedad muy típica de navegantes y sociedades campesinas.
La toxicidad, los excesos 100 mg/d se excretan. El exceso aumenta la absorción intestinal de hierro, y cálculos renales, así como antiresfriados.
Cuando el medio es ácido, el hierro se absorbe mejor.
En conclusión, el ácido ascórbico juega un papel muy importante en el organismo, y hay que tomar las dosis oportunas porque mayor dosis de la recomendada se excreta a través de la orina, y no llegar a la recomendada produce enfermedades muy peligrosas, como el escorbuto.
