Cuando se practica un deporte, y sobre todo con entusiasmo y con ganas de mejorar en él, la mayoría de las personas se centran en entrenar el movimiento. Por ejemplo en tenis, mejorar el golpeo de la pelota, los saques, etc. En el caso del fútbol, la mayoría de los practicantes se centran en mejorar su potencia de tiro, para lo cual se marcan como objetivo golpear al balón desde distintos ángulos apuntando a un objetivo, repetidas veces un día tras otro. Como entrenamiento es correcto hacer este tipo de práctica, ya que es la forma más directa de intervenir en la mejora del tiro, pero cuando el objetivo se sitúa más allá, lo más óptimo sería entrenar desde la base: el entrenamiento en el gimnasio.
La base para mejorar en todos los deportes se encuentra en el gym. Todos los deportistas de élite, tanto futbolistas como jugadores de baloncesto, tenistas, luchadores de artes marciales… dedican parte de sus entrenamientos a practicar la musculación. Esto es debido a que mejorar el cuerpo crea una base para tener capacidades óptimas que aplicar a otros deportes, ya que en los movimientos o técnicas de las distintas disciplinas se implican músculos que requieren ser entrenados para poder mejorar. Por supuesto esto debe estar acompañado de un entrenamiento específico de el determinado deporte.
Entrenamiento para mejorar la potencia de tiro
Para mejorar la potencia de tiro, lo primero que hay que hacer es entrenar las piernas. Una base muscular sólida en lo que viene siendo la «herramienta de trabajo» de un futbolista hará notar mejorías a corto plazo, proporcionando equilibrio, mayor control sobre los movimientos y la posibilidad de ejercer una mayor fuerza en los disparos. Ejercicios como sentadillas, extensiones de cuádriceps, curls femorales y peso muerto con las piernas rígidas fortalecerá el grupo muscular. No es necesario cargar un peso excesivo, es más, se debería centrar más el trabajo a series largas con pesos que se dominen para aumentar la resistencia de los músculos.
Además de el entrenamiento específico de piernas, existe un complemento llamado chaleco de resistencia, que puede ser muy útil para mejorar la arrancada, la velocidad, y en definitiva, hacer un tiro más potente. Este chaleco cuenta con anillas que se enganchan a la poleas, y añadiendo un peso que ofrezca una resistencia moderada y trabajando series de salidas explosivas, puede hacer de un entrenamiento de piernas óptimo, un entrenamiento completo. Es tan útil para el fútbol, como para deportes de velocidad.
Por tanto, se incluiría el entrenamiento de piernas como base. Pero, ¿de dónde nace la fuerza de un disparo?
Al echar hacia atrás la pierna que va a golpear el balón en fútbol, se puede observar que la única parte del cuerpo que se encuentra en tensión o completamente estirada en ese momento son los abdominales. En efecto, la potencia que va a dirigir el disparo ejecutado de la pierna nace de la total extensión y posterior contracción abdominal (en conjunto con los músculos de las piernas). Por tanto, se podría confirmar que hacer un trabajo abdominal implicaría a la larga una mejora de la potencia en el tiro. Es uno de los detalles que menos se tiene en cuenta a la hora de entrenar este tipo de «problemas», y puede ser una de las soluciones más efectivas. Además, obtener una base abdominal rígida aporta equilibrio al cuerpo, sobre todo en choques o luchas por un balón dividido.
Si al entrenamiento de tiros desde distintos ángulos, se le añade el trabajo en el gimnasio siguiendo estas pautas, se podrá mejorar en la totalidad la potencia de tiro. Que se mencionen solo los grupos musculares de las piernas y abdominales, no significa que solo sean esos los que se deban entrenar en el gimnasio. Estos son los ejercicios que se enfocan a la mejora de la potencia de tiro, pero para crear una base sólida se debe entrenar el cuerpo entero.