Cómo formular una dieta contra el estrés

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Dieta contra el estrés. La forma en que comemos influye en todo aspecto de nuestras vidas, y el estado emocional no queda exento.

En situaciones de estrés la dieta es fundamental, sobre todo para evitar incrementar el grado de ansiedad y nerviosismo. Se deben de evitar bebidas con cafeína y exceso de azúcar, pero tomar mucha agua para hidratar el cuerpo y calmar los nervios.

Dieta contra el estrés:

Algunos alimentos ayudan a mejorar la calidad de vida y bajar el nivel de ansiedad, y son un complemento efectivo del tratamiento contra el estrés.

Toma zumo de naranjas o pomelo por la mañana en ayunas, acompañado de una cucharadita de germen de trigo.

Incorpora a tus comidas levadura de cerveza (no la usada para leudar), ya que tiene propiedades reconstituyentes y depurativas, además combate la sensación de abatimiento. La levadura de cerveza es antibacteriana, regula la función intestinal, es rica en vitaminas B1, B2 y niacina y puede ser usada en infinidad de alimentos (sopas, caldos, yogur, cereales, ensaladas…) 

Come brócoli, acelga y espinaca, como toda verdura de hoja verde porque son ricas en calcio, potasio, acido fólico, sales minerales y fibra.

En la cena come liviano, con poca sal y nada de grasas. Antes de acostarte toma una taza de leche tibia con miel para inducir al sueño.

Usa germen de trigo en tus comidas, este alimento es rico en vitamina E, aumenta la fertilidad, posee aminoácidos de gran valor biológico, ácidos grasos esenciales, vitaminas del grupo B, sustancias antianémicas, y oligoelementos como manganeso, cobalto y cobre.

Come ajo, este alimento es un potente germicida, ayuda a depurar los intestinos, la sangre y reducir el colesterol malo cuando se lo ingiere en ayunas. El ajo también es efectivo contra el reumatismo crónico, agotamiento, pérdida de vitalidad, enfermedades de los nervios, diarrea y acidez estomacal; ayuda a mejorar la digestión y estimula el apetito.

Tus desayunos tienen que contar con frutas, cereales integrales y lácteos. La merienda puede estar compuesta por licuados, zumos de frutas frescas, tisanas, etc.

Evita tomar bebidas alcohólicas, comidas picantes, alimentos grasos, frituras, y comidas flatulentas.

Come hasta sentirte saciado, pero no a reventar; mastica despacio y NUNCA hables de negocios o problemas durante la comida.

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Carlos

Científico ambiental, aunque mi verdadera pasión es la de divulgar mi estilo de vida y los hábitos que han provocado una mejora en mi vida aumentando mi forma de afrontar las cosas. Espero aportarte información de interés.