La osteoartrosis (también conocida como artrosis) o por sus siglas OA, consiste en un desgaste del cartílago articular, que puede ser progresivo. La enfermedad puede afectar cualquier articulación, pero las más frecuentes son las manos, rodillas, caderas y la columna vertebral.
Por lo general los síntomas se desarrollan gradualmente y afectan inicialmente en una o varias articulaciones. El dolor es el principal síntoma , que aumenta por lo general con la práctica de ejercicio. En algunos casos la articulación puede estar rígida principalmente por las mañanas o después de permanecer inactivo. Los siguientes consejos te ayudarán a mejorar la calidad de vida y disminuir los síntomas.
- Mantén un peso corporal correcto: La obesidad es una de las principales causas de esta enfermedad. Además, hace que ésta progrese más rápido. No es necesario seguir una dieta estricta ni existen alimentos prohibidos en esta enfermedad. Una alimentación balanceada es suficiente, pero se recomienda consumir coles de bruselas, col, repollo o brócoli, ya que contienen una sustancia llamada sulforafano que retarda la destrucción del cartílago en las articulaciones. Evita las grasas saturadas y las grasas trans presentes en la comida rápida y el azúcar, ya que están asociadas con el aumento de peso y obesidad. Estudios recientes demuestran que una persona que pierde peso (tan solo 5 kilos) reduce el riesgo de sufrir OA en un 50% en la rodilla.
- Ejercicio: el ejercicio protege a la articulación y aumenta la fuerza de nuestros músculos . Disminuir al máximo la movilidad, hace que la persona con osteoartritis se convierta en dependiente de los demás. Es bueno combinar los ejercicios aeróbicos (caminar, correr, nadar, andar en bicicleta) con los ejercicios de fuerza para reforzar la musculatura. Los ejercicios aeróbicos se recomienda sean realizados 5 días a la semana y los ejercicios de fuerza 3 veces por semana, siempre tomando en cuenta que hay que hacer un breve calentamiento y después realizar series de 10 a 12 repeticiones. Es importante evitar los deportes de contacto o de gran sobrecarga física pues estos afectarían aun más a este padecimiento. Si al realizar cualquier ejercicio se presenta dolor, es importante suspenderlo y acudir a tu médico.
- Medicamento: se disponen de muchos tipos de medicamentos que pueden ser beneficiosos en esta enfermedad. Existen analgésicos, anti inflamatorios, geles, cremas, infiltraciones locales y fármacos que pueden evitar la progresión de la osteoartritis. Sin embargo, tu médico es el indicado para decidir en cada momento de la evolución cuál es el más propicio para ti. No te automediques.
- Suplementos que puedes consumir: para ayudarte a mantener una mejor condición articular en estructura y funcionalidad, junto con tus rutinas de ejercicio y alimentación, es bueno el consumo cotidiano de compuestos naturales llamados condroprotectores; como son la condroitina y glucosamina; sustancias que forman parte integral del cartílago y que junto con los ácidos grasos Omega-3 (que provienen de pescados de agua fría) ayudan al mantenimiento de tus articulaciones que por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes hacen que se reduzca la degradación del cartílago articular mejorando la capacidad del organismo durante la actividad deportiva tanto en personas jóvenes como en mayores de 50 años.
