Quiero entrar al mundo del GYM
Seguramente (y ahora que se viene año nuevo), ya has comenzado a hacer una lista de propósitos que según tu, te has propuesto a cumplir este 2015. Bien, lo más probable es que entre tus propósitos se encuentre hacer ejercicio. Y todas las personas (no nada más tu), nos hemos propuesto lo mismo alguna vez, el inconveniente es que solo queda en eso, en una simple y arrumbada propuesta.
La mayoría de las personas que entra al gimnasio por primera vez (si es que llegan a entrar) no sabe por donde comenzar, y es normal y justificable. Lo que no es justificable es dejar de asistir a tus sesiones de entrenamiento porque simplemente no sabes que rumbo tomar.
¿Porqué quiero entrar al gimnasio?
La primer pregunta que te tienes que responder es la misma que expone este título. Imaginemos que vas en un barco y el motivo por el cuál estas asistiendo al gimnasio es tu destino, entonces, haciendo esta analogía, te puedes dar cuenta que al no tener un motivo claro por el cual estás asistiendo al gimnasio, es lo mismo que ir en un barco sin rumbo. Y si ya te diste cuenta que no sabes por qué tomaste la decisión comenzar en el mundo de las pesas, entonces es momento que te vuelvas a replantear todo y te fijes un «por qué».
No olvides que el motivo por el que vas a comenzar a ir debe ser algo real y que te motive, es decir, olvídate de cosas como:
«Quiero entrar al gimnasio, porque quiero estar como Arnold»
Entonces, mejor piensa que quieres tener un cuerpo atractivo, quieres salud, quieres tener más condición física, quieres ganar fuerza, o simplemente quieres «gastar tiempo».
Si ya elegiste un motivo por el que vas a comenzar, entonces ya llevas un paso adelante.
¿Cual es mi objetivo? Debo cuantificarlo
Ya que tienes un «por qué», ahora pasa a cuantificar y ponerle un objetivo a ese «por qué», es decir, si tu motivo de comenzar en las pesas es ganar más fuerza, entonces cuantifica eso, por ejemplo, supongamos que en mi primer día de gimnasio levanto 10 Kg en Press de Banca, entonces puedo proponer que para fin de año, yo voy a estar levantando 30 kg.
No olvides que tus metas deben ser realistas y a veces un poco subestimadas para que puedas alcanzarlas con mayor seguridad, por ejemplo, es posible que si comienzas levantando 10 kg en press de banca, sea muy probable que cada mes puedas ir aumentando 2 kg más a la barra, esto quiere decir que en 12 meses podrás estar levantando hasta 34 kg, sin embargo, como «factor de seguridad», decimos que levantaremos 30 kg (después de todo no sabemos si nos vamos a lesionar o si por alguna otra circunstancia se tendrá que ver retrasado el entrenamiento, ya saben, escuela, trabajo, etc.).
Recuerda que los objetivos siempre deben ser realistas, jamás esperes levantar 50 kg más en un periodo de 12 meses, porque eso no va a pasar ¡nunca!.
Ya tengo mi objetivo, ¿ahora como lo trabajo?
Ya tienes tu objetivo, para trabajarlo necesitas alguien que te asesore, en los gimnasios siempre hay instructores, a el le puedes comentar tus objetivos y el sabrá que es lo mejor para ti, sin embargo, curiosamente hay algunos gimnasios en los cuales, los instructores son gente desinformada, si están musculados, pero eso es por otros motivos que se hablarán en otro artículo. Por eso siempre debes estar informado y buscar información por tu cuenta.
Para ello, hay cosas muy básicas que debes saber y te dejaré aquí algunas palabras clave que puedes investigar si quieres saber más al respecto. Son temas que son medianamente extensos y que debido a que podríamos perder la esencia y temática de este artículo, hablaré de ello en días próximos.
Las cosas básicas que debes saber son:
- Intensidad de entrenamiento
- Volumen de entrenamiento
- Densidad de entrenamiento
- Frecuencia de entrenamiento
- Hipertrofia y fuerza
- TMB
- 1RM
Lo anterior de cualquier forma será explicado en días próximos, pero por ahora primero lo primero, es imposible aprender a correr antes de aprender a gatear.
Motivación
Por último, ya solo nos queda la motivación. La motivación es la que nos mantiene vivos, por ello es fundamental que siempre la tengamos «a la mano».
En mi experiencia, y en experimentación puramente empírica, me he dado cuenta que en la mayoría de las personas, bastan solo 3 meses para que el hábito de asistir al gimnasio se adhiera a nuestro pensamiento. Esto quiere decir que los primeros tres meses son fundamentales, en esos tres meses debes encontrar y tomar todo lo que tengas a la mano para sentirte motivado. Puede ser la chica que te gusta, el «como te quieres ver en un futuro», tu salud, la música. Lo que sea, tómalo, pero siempre mantente motivado lo mejor que puedas esos 3 meses.
Cuando ya se te forme el hábito, incluso incluso sentirás culpa el día que dejes de asistir a tu sesión de pesas y ese día, puedes estar seguro que ya será difícil dejar tus metas de lado.
Conclusión
No olvides que siempre que alcances tus metas, deberás plantearte nuevos y más grandes objetivos, si este año levantaste 30 kg, el que sigue ve por 60 kg, después por 80 kg, y así sucesivamente.
Como ves, ir al gimnasio no es tan difícil después de todo, claro, solo si tienes las cosas claras y tienes conocimiento de algunos conceptos básicos en el mundo de la musculación (o en su defecto un buen instructor).
Recuerda, siempre sigue estos pasos en este orden:
- ¿Porque quieres entrenar?
- ¿Cuál es tu objetivo? Cuantificalo
- Investiga y/o busca alguien que te asesore
- Mantente siempre motivado y forma de el entrenamiento un hábito
- Repite el ciclo desde el punto dos, cada vez que cumplas tus objetivos
No tienes excusas todo lo tienes más claro. Entrena, se mejor, sal de tu zona de confort y muevete.
Si tienes dudas deja un comentario, se tomará en cuenta para responder a dudas en posteriores artículos.